ROMA-ITALIA (29-10-2010).- El servicio y la entrega por los demás es una de las actitudes que santa Teresa quiso impregnar en la vida de todo carmelita descalzo. Servir a Dios, a la Iglesia y a la comunidad se convierte, para los que se acercan a la Santa de Ávila, en una exigencia y en un verdadero ejemplo de vida a imitar.
El P. Aloysius Denney, Delegado General para el Carmelo Seglar, señala en la carta publicada hoy en la web de preparación a la celebración del V Centenario del nacimiento de Santa Teresa de Jesús www.paravosnaci.com), el gran descubrimiento que este empeño teresiano por el servicio ha significado en su propio recorrido vocacional.
Denney recuerda que lo que le atrajo al Carmelo fue su dimensión contemplativa, y al igual que le sucediera al joven Juan de la Cruz cuando se encontró con Santa Teresa en Medina del Campo, la lectura de los escritos teresianos presentó ante él el desafío de que “la vida contemplativa sobre la que santa Teresa escribe es la que se muestra a sí misma en un servicio concreto”.
El propio Delegado General para el Carmelo Seglar reconoce que “Ser Carmelita no es un privilegio, sino una responsabilidad. La responsabilidad es servir al Señor, la cual se lleva a cabo atendiendo las necesidades de nuestros hermanos y hermanas en la Iglesia y en el mundo, sirviendo a nuestras familias y a nuestras comunidades”.
Nenhum comentário:
Postar um comentário